hoy es Nochebuena. Cuando era pequeña , en casa, mi madre y todos íbamos de coronilla para arreglar y tener a punto la comida del dia de Navidad. Era especial: venían mis hermanos con sus parejas y a veces tambien los padres de las respectivas parejas. Después de comer era lo más bonito y divertido del dia: un regalo para cada uno. Y se llenaba la casa de alegria, papeles de envolver rotos y risas y sorpresas por parte de todos.
Hoy de todo aquello no queda nada: mis padres han muerto, mis hermanos y sus parejas viven su vida y yo me he quedado viuda, y aunque los suegros de mi hija me hagan ir a su casa a pasar Nochebuena, y el dia de Navidad, mi hermano pequeño y su mujer e hijo vamos a casa de mi hija, ya no es lo mismo. El recuerdo de los que no están flota en el ambiente, y, aunque no se les nombre, todos nos acordamos de ellos. Yo me siento muy sola, mi marido, que era mi gran apoyo y el amor de mi vida, y yo su gran amor, nos dejó, y todos nos quedamos como sorprendidos y huérfanos, pues era una gran persona estimada por toda la faamilia. Los recuerdos se agolpan en mi cabeza, y al mismo tiempo los aparto porque se que lo pasado no puede volver, y recordar es sufrimiento y ya no quiero sufrir más. El futuro nadie sabe cómo va a ser, sólo nos queda el presente, y tratar de disfrutarlo lo mejor posible.
Así que voy a enterrar mi pena en algún sitio que nadie encuentre, cerrar lo que escribo y arreglarme lo mejor que pueda, porque él así lo quería: yo más guapa y elegante que nadie.
Dime Niñooo, de quien eres, todo vestidito de blancoooo.....
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